La religión es el conjunto de prácticas y creencias asociadas a un ser superior supremos que rige cada una de nuestras acciones y decisiones y que dirige en gran medida los destinos de nuestras vidas y de los seres humanos
Diversas ciencias humanas se han interesado por el fenómeno religioso desde sus respectivos puntos de vista como por ejemplo la antropología, la sociología, la psicología y la historia de las religiones. Por otro lado, disciplinas como la fenomenología de la religión estudian específicamente sus manifestaciones intentando dar con una definición exhaustiva del fenómeno y mostrar su relación con la índole propia del ser humano.
En un sentido más amplio, también se utiliza para referirse a una obligación de conciencia que impele al cumplimiento de un deber.
Hay diferentes clasificaciones de las religiones, por ejemplo:
Por concepción teológica
Teísmo: es la creencia en una o más deidades. Dentro del teísmo cabe distinguir entre:
Monoteístas: aquellas religiones que afirman la existencia de un solo Dios, que a menudo es creador del universo. Las religiones monoteístas más numerosas son el cristianismo y el islam. Otras más minoritarias son el judaísmo, zoroastrismo o la fe bahai.
Politeístas: las religiones que observan la creencia en múltiples dioses, como sucede en varias religiones del hinduismo así como en las históricas griega y romana.
Heno teístas: el orientalista alemán Max Muller acuñó éste término en el siglo XIX para referirse a la creencia en un sólo Dios en la que se admiten otras deidades, como sucedía en la antigua religión egipcia especialmente con Atentón.
Dualistas: aquellas religiones que suponen la existencia de dos principios o divinidades opuestos y enfrentados entre sí, aunque sólo uno de ellos suele ser merecedor de veneración por sus fieles mientras que el otro es considerado demoníaco o destructivo.
No teístas: Hay religiones como el budismo y el taoísmo, que desdeñan o rechazan la existencia de dioses absolutos o creadores universales, o bien les otorgan funciones menores o muy específicas
La mayoría de las diversas religiones gozan de buena salud en número de seguidores y su número ha aumentado en todo el mundo. En los países con anteriores regímenes comunistas la religión se ha revitalizado a una velocidad sorprendente como muestran los casos de Rusia y China.
Ganesh, la popular deidad hindú destructora de obstáculos y patrón de las artes, las ciencias y la sabiduría.
No existen hasta la fecha unas estadísticas fiables del número de seguidores de las religiones del mundo. Cada religión suele aportar sus propios cálculos estimativos, que a menudo suelen sumar seguidores sin criterios demasiado científicos, tales como geografía, ritos tempranos de iniciación (bautismos, etc.) o la pertenencia familiar.
La religión se caracteriza precisamente por estar encasillada en un estereotipo, ya que si hablamos de estos, podemos decir que son imágenes mentales que ya están plasmadas en cada uno de nosotros y se convierten en patrones o modelos de conducta que se vuelven predeterminados para nosotros.
Teniendo en cuenta lo anterior, la iglesia se enmarca dentro de un conjunto de creencias, ritos y aspectos personales rígidos que desde la antigüedad han caracterizado e identificado a los miembros de esta y sus prácticas.
En la imagen, podemos encontrar composiciones q rompen con los estereotipos tradicionales como las que nos presenta David LaChapelle como un artista que rompe totalmente los estereotipos sociales, políticos, religiosos y sexuales que conocemos.
En el desarrollo de proyectos fotográficos editoriales ha venido manejando temas como la decadencia de la religión, los valores cristianos y denigrar los iconos de esta.
David Lachapelle hace de sus creaciones artísticas un canal de transmisión que excita las emociones. En sus obras de arte podemos rememorar lo que nos constituye como humanos; seres viscerales, pasionales, excepcionales.
En el interesante trabajo de este fotógrafo, podemos encontrar piezas de un nivel técnico increíble, pero sobre todo, de nivel conceptual muy alto y profundo como las que se presentan al final de este ensayo en las cuales De nada sirve la belleza y el erotismo si todo terminará por hundirse en medio del caos urbano. De nada valdrá refugiarse en la Casa de Dios porque la religión también ha perdido el rumbo. En donde el autor de la obra se pregunta, ¿qué pasaría si Jesucristo resucitara ahora en medio de las injusticias de las sociedades modernas? El Mesías quedaría atrapado entre los valores de la sociedad de consumo ¿hay otra? y una juventud de país desarrollado que no busca más que el dinero. ¿Ofrecería Jesucristo hoy en día su Última Cena en suburbios multirraciales alejados de la basura blanca políticamente incorrecta?
Además, la forma de las fotografías imita a las pinturas que decoran en las iglesias, hasta por las propias expresiones de tristeza y súplica, salvo por personajes que señalan con la mano como reprochando, las figuras femenina y la presentación de un Cristo mas humanizado y menos santo.
Las piezas graficas de laChapelle vienen con una fuerte carga bizarra y grotesca, tal vez producida por sus grandes y fuertes enfrentamientos con la vida, contrariado por los infortunios de la misma y las continuas pérdidas de familiares y amigos, tal vez se dedico a atacar fuertemente a la iglesia como un ente que lo abandona y la muestra como la falsa esperanza que nunca llega, gran parte de su expediente fotográfico expone fotografías fuertemente recreadas en conceptos descontextualizados totalmente de los estereotipos comunes de la religión donde la crucifica de la manera más cruel, sin miedos a pronunciamientos de la misma y de la sociedad que castiga moralmente este tipo de actos.
Pero irónicamente con la creación de estas imágenes de LaChapelle, audaces y espléndidas, ha forjado un estilo particular que resulta único, original e inconfundible convirtiéndolo en uno de los fotógrafos contemporáneos más influyentes que emerge del ámbito del espectáculo. Con su estilo muy personal, las imágenes de este artista exploran terrenos extremos, desquiciantes, eróticos, muchas ocasiones barroquizantes, a veces sublimes y otras de extraños niveles de ostentación visual. Asumir el riesgo de decir verdades que incomodan valiéndose de imágenes perturbadoras es muy común entre los artistas, sin embargo, aunque sus medios de expresión sean calificados como irreverentes, siempre son invitaciones a reconsiderar, revisar o replantear el modo en que la sociedad actual enfrenta las contradicciones, injusticias, abusos y excesos que la debilita.
Ultimamente, LaChapelle se ha inclinado hacia nuevos temas y planteamientos artísticos y conceptuales sobre estereotipos preconcebidos sobre la Pornografia, a lo cual el artista alega: “Mi meta es comunicar mis ideas y sentimientos con las personas. Al igual que los grandes muralistas, como Diego Rivera, los artistas pop trataron de comunicarse con la gente de la calle, no sólo con un puñado de elites o intelectuales. Me resulta frustrante mucho del arte contemporáneo, que al parecer no intenta comunicarse con el público.
“Ante eso mi rebelión consiste en ser muy claro respecto de lo que quiero decir –tampoco dárselo en la boca–, sino ser lo suficientemente ambiguo para expresar con belleza, pero también tener un punto de vista y un mensaje que quisiera transmitir.”
En estos momentos de “gran confusión y ansiedad”, para LaChapelle las personas se vuelven hacia el arte contemporáneo como forma de ilustración: “Una de las razones por las que el público desea ver una nueva obra de teatro, leer un nuevo libro o ir a ver una nueva exposición es para encontrar un sentido de claridad del mundo en que vivimos”.
Si por un lado aborda “cuestiones existenciales que trata de resolver”, en otro nivel, y mediante su fotografía figurativa, intenta “rescatar el desnudo de lo más oscuro de la pornografía y mostrarlo de nuevo en una especie de renacimiento en el modo de ver la figura desnuda rompiendo el estereotipo que se tiene de esta en la sociedad actual.
LaChapelle gusta de inundar con sus fotos museos e iglesias para abordar la idea del “la religión, porque esta va en contra de las actitudes morales y éticas que el cree obsoletas, vacías y sin ningún sentido”.
A continuacion, presento una serie de fotografias de David en las cuales podemos contemplar su explendido trabajo.
BIBLIOGRAFIA: